Cuarenta días después del nacimiento de Jesús, María y José lo ofrecieron a Dios como su hijo primogénito. Cumplían así la Ley de Moisés, que obligaba a la purificación de la madre y mandaba rescatar al primogénito pagando por él una limosna en el templo. María y José, como eran pobres, ofrecieron en sacrificio unas […]